IBAGUÉ. El taxi lleno de sangre fue la evidencia de que un miembro de la ‘Mancha amarilla’ fue víctima de asaltantes que se hicieron pasar como pasajeros, lo despojaron de sus pertenencias y lo lesionaron en una de sus extremidades.
Historia. Darío Andrés Guzmán no se imaginó que la carrera que recogió el domingo sobre las 9:00 de la noche en la Avenida Ambalá con calle 33 terminaría con él herido y atracado.
Los tripulantes le solicitaron el servicio a Guzmán, que manejaba el taxi de registro WTN 510 de la empresa Mega Taxi. En el camino todo transcurría normal, pero los pasajeros le pidieron al profesional del volante que tomara hacia el sector de Calambeo.
Cuando iban por el colegio Amina Melendro, los usuarios se ‘transformaron’ en delincuentes que con armas blancas amedrentaron a Guzmán y lo hicieron orillar en una cuneta para quitarle sus pertenencias y el producido del día.
El conductor del ‘zapatico’ trató de que los ladrones no se le llevaran sus ‘cositas’ y en medio del forcejeo resultó herido en una de sus manos.
Los ‘cacos’ huyeron, mientras que varios colegas de Guzmán arribaron al sitio al igual que un cuadrante de la Policía.
Pronunciamiento. El coronel, Jorge Hernando Morales Villamizar, comandante de la Metib refirió que, “estamos efectuando los planes correspondientes con los taxistas, diariamente nos reunimos con ellos. Ocurrió el atraco a un taxista, tomaron la carrera y posteriormente cometieron el hurto. Fue capturada una persona, continuamos con los planes con el transporte público”.
Aunque hubo una persona detenida y que según las autoridades fue identificada por la víctima no hubo denuncia.