IBAGUÉ. La investigación del grupo de la Sijín de la Metropolitana sobre el hurto de dos vehículos Spark en mayo, uno el 27 en Mercacentro de El Poblado, y el otro el 29 por el sector de la Plaza El Jardín, los llevó a una nueva modalidad del delito de falsedad marcaria. Se trata del cambio de cabinas de carros a taxis de modelos viejos para que queden como ‘nuevos’.
Caso. De acuerdo con las autoridades, en un taller de la calle 28 con carrera Cuarta Tamaná hallaron la cabina de un taxi modelo 2015, la cual lo único que tenía para identificarse era la placa WTN 628, pues las plaquetas fueron borradas, situación que llamó la atención de los uniformados, quienes averiguaron a qué carro pertenecía esa matrícula y se percataron que correspondía a un ‘amarillo’ que circulaba por las calles ibaguereñas, pero que era modelo 2007. Por lo que el ‘cascarón’ junto con el vehículo de servicio público fueron incautados para iniciar un proceso investigativo con la Fiscalía, ya que se trataría de una modalidad delictiva, pues no descartan que las cabinas sean de carros hurtados.
Presuntamente las sillas y demás elementos interiores del taxi iban a ser puestos en el ‘monocasco’ del otro carro, del que no se sabe si anteriormente era particular o de servicio público, de esta forma quedaría al ‘peluche’.
Según la Policía Metropolitana las carrocerías no las venden las concesionarias, por esto las personas compran las autopartes para mejorar sus vehículos.
Las empresas comercializan solo los accesorios, ya que el ‘casco’ tiene un costo igual al de un carro nuevo.
No obstante la Policía indicó que la mayoría de automotores que comercializan son los ‘amarillos’ porque son los que más se deterioran por el uso.
Aunque este es el primer caso detectado por la Unidad Investigativa de Automotores de la Sijín no descartan que hayan más, pues en el sitio observaron otra cabina.
